Como hablar "de ti"sin caer en el error de hablar "por ti", si tus segundos vividos parecen míos, tu aire parece mi arma vital para vivir, si tu historia parece la mía contada años después...
Como puedo hacer para no tentarme con mi subjetividad, imposible evitar la realidad de que formas parte de mi, o dicho de otra manera...que yo formo parte de tu ser...la verdad que no me deja mirar desde el otro lado.
Como explicar mi admiración y mi orgullo hacia ti sin caer en la paranoia de la incredulidad por ser tu mitad, me seria mucho mas fácil afirmar mi fascinación por tu esencia, por la crónica de tus días, por la existencia de tu leyenda en este mundo. Puedo confirmar que eres la persona de la cual aprendí mucho, sobre todo a vivir, a no temer a lo que viene, a tener paciencia con los demás y conmigo mismo, aprendí de la paz interna que tienes, del amor que se dibuja en tu sonrisa, de esa humildad al ofrecer tu mano y tu corazón, de esa oportunidad que das a los demás...sobre todo a los amigos y a la familia. Sé que lo mas auténtico a través del tiempo han sido tus sentimientos, los afectos iniciales, el hogareño, los elegidos...sin importar el dolor, la herida, la lágrima que haya perturbado tu camino, ese largo camino blanco, demasiado blanco como para mancharse por ello. Esa fuerza para no derrotarse y seguir, ese valor para ponerle color a los días grises...
Tratar de ver tu historia a través de tus ojos me podría resultar fácil, aún sin entenderla del todo, pero explicarla y contarla sería un desatino, pues es tu narración, algo muy personal y como tal no soy yo quien en escritos intente dar sentido o valor a algo que tú ya hace tiempo llevas en el corazón: tu propia vida. Solo pretendo decirte que te admiro, que eres lo especial que siempre soné, que tu ser maravilloso se merece todo, y más, de lo que intento darte. Eres especial y me alegro de haber sido el elegido.
Hoy estas aquí con las ganas de siempre, con 45 años vividos, con la felicidad en el alma y una historia que llevas en el puño para recordar que se puede sobrevivir siempre que quieras, para sentir que la esperanza siempre asoma, para saber recoger luego lo que se ha sembrado, y sobre todo para luego creer, creer que se puede si se quiere.
El 17 de Febrero Javi cumplió 45 años, orgulloso de poder contarlos.