miércoles, 24 de junio de 2009

A mi tia Cuky

Hace más de seis meses que quería comenzar a escribir estas lineas, y aún teniendo tanto tiempo por detrás todavía me es difícil poder teclear alguna palabra, sobre todo por que van dirigidas a mi querida tía Cuky, a quien sin querer he hecho daño... No me motivó escribir hoy para hablar del pasado y de lo que sucedió, solo sé que tengo que pedir perdón por esas lágrimas que no he visto pero si he sentido...perdón por haber trasnformado un amor de amigos, de hermanos, de tía y sobrino, de madre e hijo en silencio sin ser merecido, perdón por no saber manejar una situación ajena a mi, perdón por causar un dolor que yo también he sufrido.
Tía Cuky, con diez años me diste la bienvenida a tu mundo, con un lógico recelo de la edad al principio. Pero mis borrosos recuerdos no me fallan y sé que de un poco muñequito de compañía pase a ser el bebé de tu mundo de niña - mujer. También reconozco una etapa de celos reclamando tu cariño y tu amor, la etapa en la cual sin querer casi desaparecí por un tiempo de tu vida y mi primo ocupo mi lugar...era tan niño todavía...
Luego vino la adultez y con ella la reafirmación de ese sentimiento que al día de hoy no podría dejar de existir así porque sí, por que un sentimiento verdadero"no se puede borrar de un día para el otro", el tiempo de compañía, de comprensión, de lágrimas y de risas, de vivir. Y por último, me regalaste ese lugar privilegiado al lado de tus cuatro angeles que tuvistes como hijos.
Tengo latente tantas imagenes en mi retina, cuando escondíamos las cartas a mi Mamila para poder jugar a escondidas a la "LOVA" y no hacer las tareas de la casa, cuando nos enseñabas a bailar música disco para salir en el corso infantil, cuando me mandabas a que hablara con Petty y vos te escondías detrás de la puerta de la casa de la Mamila y yo tontamente no sabía disimular...se me dibujan sonrisas mientras transcribo esos recuerdos pero también se me nubla la mirada y siento un nudo en la garganta.
Hoy decidí escribirte, y no para decirte lo mucho que te quiero, porque sería muy fácil hacer solo eso, sino porque también quería demostrártelo acordándome de tu cumple, recordando, escribiéndote cosas bonitas, y regalándote un sencillo vídeo, todo con mucho amor y cariño, es lo más que puedo hacer estando tan lejos. También para darte las gracias por tanto amor recibido de tu parte y decirte lo orgulloso que siempre estuve de mi tía-amiga por todo lo que has significado en mi vida.
Entre palabra y palabra intento llamarte pero no puedo comunicarme ni a tu escuela ni a un número de celular que no se si seguirá siendo el mismo...ya he desistido en el intento, son las nueve de la mañana (aquí las dos de la tarde) y ya no puedo darte la sorpresa que quisiera de ser uno de los primeros llamados, de darte una de las primeras sonrisas.
Querida Tía, como hacerte entender que tú eres un sentimiento más de los que llevo arraigado en lo más profundo de mi corazón, una alegría más en mi corta (o extensa ) vida, una ternura imposible de olvidar. Hoy es tu día, tu cumpleaños y ruego a Dios que tu festejo sea completo, que tu felicidad sea completa rodeada de tus seres queridos, de la Mamila, de Juampi, de Mercedes, de Morena, de Pol, de todos los que te quieren, y entre ellos quiero también estar yo...porque también te quiero...me dejas?

domingo, 14 de junio de 2009

Marcelo

Con tu uniforme de colegio y viéndote pasar todas las mañanas religiosamente comenzó nuestra amistad, al principio un poco tímida y guardando secretos que luego serian imposible no compartir, con la adolescencia de marco en un contexto diferente en el que hubiesemos querido aterrizar pero siempre aceptando todo y cada minuto de un presente ya lejano.
Así crecimos casi a la par y compartiendo media vida, experimentándola y amoldándola a nosotros porque creíamos que no era justo amoldarse a ella, aunque irremediablemente sabíamos que el mundo era como es...
No será la primera vez que escribo sobre tí, pero hoy es especial, es tu cumpleaños y no quería dejar de hacerlo. Como no recordar en mis escritos a ese eterno amigo que no tengo a mi lado pero que a pesar de esa enorme distancia lo siento muy cerca mío. Como no valorarte después de haberme dado tanto afecto, tanta compañía, la paz de tu familia, después de ofrecerme el calor de tu hogar, son cosas que tienen un valor incalculable.
Me parece que fué ayer cuando hacíamos esos viajes maratónicos disfrutando de la vida y de la compañía del otro, de los atracones de comidas y luego el dolor de estómago, o cuando nos exiliábamos al retiro de la naturaleza, al río, cuando nos achicharrábamos al sol con la idea de tener un buen color todos los veranos, la etapa de L`Mesón y el "Duvidú", cuando te enamoraste y apostaste todo por ese amor,cuando no resultó y hubo que levantar cabeza, cuando hubo gente que se marchó...y no volvió, cuando pareció oscurecer y reviviste.
En algunas de esas etapas no estuve a tu lado pero las viví como si así lo fuese, por que las sentí de la misma manera. Con impotencia por no haber estado para dar mi abrazo de amigo, mi hombro de hermano, pero se que te rodean muchas personas que te quieren y que te tienen mucho afecto, familiares, amigos pasados, amigos nuevos, que estan a tú lado.
Han pasado más de cuatro años desde la última vez que nos despedimos, tú con carita de nostalgia y yo con el dolor en la mía, porque sabíamos en nuestro interior que esa despedida iba a ser larga, más de la que hubiesemos querido.
Hay veces que pasa el tiempo y no tengo noticias tuyas, me preocupo, pero luego siempre hay alguien que me cuanta de tu vida, y me tranquilizo. Ultimamente supe que estas haciendo cosas muy positivas y eso me alegra muchísimo, ya no somos tan jóvenes(aunque quisiéramos) y tenemos que ver y hacer las cosas con más responsabilidad, y vos lo vas a lograr, se que lo harás.
Hoy soplarás unas treinta y ...tantas velitas y detrás de ellas estarán los rostros de tus amigos...y de los que no están físicamente también, el mio aparecerá allí imaginariamente y en mi sonrisa podrás leer !feliz cumple amigo mio! que todos tus deseos se cumplan y que sepas que siempre estoy a tu lado como un ángel sin alas pero siempre velando por tí.

viernes, 12 de junio de 2009

Termine el curso

Hace unas semanas termine mi curso de Avid, edición no lineal de vídeo, y me sirvió mucho, ahora me animo a hacer vídeos mucho mas elaborados que los anteriores. En el curso conocí gente muy enrollada y simpática(Laura, Laura, Teresa, Damian, Iria, Paloma, etc.) y el profe también tiene sus merito. Lo malo de haber finalizado es que ya no los volveré a ver mas, además de que no aprenderé mas, pero guardo un buen recuerdo de esos momentos.
Con Tere, Laura y Damian tomando mate en el Retiro.
Laura firmando cuando recibió el certificado, atrás el profe Santiago.

Yo con mi certificado al finalizar el curso.

He intentado poder subir los vídeos que he realizado pero el programa no me deja pues son muy pesados...y es una pena porque quería que los vieran.

miércoles, 3 de junio de 2009

Volviendo (segunda parte)

Segunda parte porque tiene mucho que ver con lo que escribí anteriormente, no en continuidad de la historia, sino en sentido. Después de escribir VOLVIENDO...tuve la grata sorpresa de que muchos amigos me contestaron dándome los mimos que quizás hacían falta a mi alma y la seguridad de mi ser se afianzó al sentir el cariño de personas que estuvieron y aún siguen estando. De todos, una sola persona contestó en forma de comentario en este mismo blog (cosa que siempre me agrada), Luis Patzzi, alguien que no veo personalmente al rededor de ocho años, demasiado tiempo, otra prueba más para comprender esa rara naturaleza del ser humano llamada amistad.
Luis, a punto de cumplir los 34 años, con el carácter eternamente adolescente; riendo de la vida, como tiene que ser, para darle un color distinto a los días que se tornan grises. Sabe darle un toque de simpatía a cada gusto amargo que se pudiera presentar. Una inmadurez ficticia que resguarda la sensatez mas prudente.
Emigro un día y eso es algo que también tenemos en común, el valor de enfrentar un mundo nuevo, conocer gente nueva, el temor a los nuevos amigos, a la pérdida de los antiguos...enfrentar la realidad de querer ser aceptado y dudarlo...querer encontrar un sitio en este mundo.
Aún recuerdo sus bromas, los sueños y fantasías de niño grande, un mundo de cuentos que solo con su imaginación podía crear. Era y seguramente seguirá siendo muy felíz, tiene los ingredientes que lo acompañaran siempre para ello: su ímpetu siempre positivo, y su familia, maravillosa familia que siempre lo cobijó con todo el amor que se merecía y merece.
Claro que como en toda historia, en todo cuento, en toda fantasía hay ratos oscuros, de melancolía, de nostalgia, de lágrimas...pero sus cuentos siempre son con final felíz, él se encarga de que sea así...entonces... la sonrisa aparece...
Debo reconocer que cuando lo conocí dudé un poco de nuestra relación de amistad, él era amigo de un amigo y por lo general esa ecuación no me resultaba, pero quizás desde él, desde esa vez en el 8º piso de los departamentos de la calle Gorritti comencé a no incluir las matemáticas en mis amistades.
Dice que siempre que lee mi blog llora, hoy espero que no lo haga, simplemente quiero hablar de un amigo que conocí hace mucho tiempo y aún sigue allí, riendo, hablando, compartiendo, a través de un ordenador pero está y eso para mí vale mucho.
Pero que hago hablando de tí?, te preguntaras Luis, te quería hacer un mimo y que mejor forma de hacerlo escribiendo aquí, en donde se que me leerás, desde allí en un rincón alejado de la patagonia a miles de kilómetros pero entendiendo mi mensaje como si estuviéramos frente a frente, comprendiendo...y con una sonrisa.

Luis, gracias por ser la hermosa persona que eres, por ver el mundo con alegria, por regalar siempre tus sonrisas, por no olvidarme.