Sin poder dormir y viendo pasar los minutos, tratando de hilar palabras que ultimamente poco me salen. Falta de tiempo, el trabajo, el estudio, la vida diaria...pero hoy "Rolling in the deep "en mis auriculares, haciendome compañía cuando los rayos del sol veraniego comienzan a asomar por mi ventana y el ritmo del día comienza a tomar forma, se me ocurre que puedo darme un tiempo(que a estas horas me sobra) para volver a teclear palabras...
En un mes de silencio (de los cuales me estoy mal acostumbrado) ha pasado mucho, y, entre tanto, la palabra " INDIGNADOS" se ha repetido por muchos lados, tomando sentidos muy diferentes en distintos ámbitos pasando a ser una metáfora de lo que no se está de acuerdo... Me dijeron ¿Porque no vas a Sol?(fui una sola vez al principio), Ariel quería evidencias de mi participación, y las ideas iban y venían...
Recuerdo (si, lo sé , siempre lo digo) cuando hace tiempo ya, allá por finales de los 90`, también me sentí "INDIGNADO", y estuve muy orgulloso de ello, protesté, reclamé, y el movimiento de ese entonces se transformó en una masa de indignados de todos los ámbitos y sectores, todos unidos reclamando justicia, igualdad, dignidad. Con el paso del tiempo eso fue cambiando de forma, los sectores se fueron concentrando, apartando, buscando el interés propio, y me sentí desilusionado. Las cosas mejoraron aquella vez? no, la reivindicación solo sirvió para ciertos sectores pero para el grueso de los que reclamabamos la solución fue paliativa e incompleta. Ah!!! si, un gran error, allí , en ese momento fue el nacimiento de un personaje que ensombrecería la figura del país, la figura del "piquetero".
Parado frente a la plaza de sol, leyendo carteles de reclamos, no puedo no recordar... y dudar otra vez...
El mundo va cambiando a pasos agigantados y no precisamente para el mejor destino, y es verdad que algo hay que hacer y que la única forma de corregir esa dirección, es exigir, protestar. Solo que ese mismo mundo se transformó en un circulo tan vicioso en sí mismo que parece imposible de parar. No es que no tenga fe, que no crea "en un futuro mejor", simplemente que las desilusiones cuestan olvidar.
Finalmente a amanecido y me costó encontrar a Adele y subirla al I-pod, quería dejarla haciendo compañía para que su hermosa voz me ayude a seguir teniendo nuevas ilusiones...
