domingo, 13 de febrero de 2011

Aires de revolución

Al día siguiente de algo tan banal como el festejo de un año más de mi vida, se producía la gran marcha del "Dia de la Ira" en la plaza de la Liberación, en El Cairo - Egipto. El inicio del cambio, la demanda del fin de una dictadura de 30 años comandada por Hosni Mubarak y toda una historia de corrupción y desigualdad en un país Árabe que no por ser distinto se merecía una autarquía que se creía inamovible.
...Y no fue fácil, a lo largo de los días el pueblo egipcio experimentó euforia, desasón, ira, desilusión, golpes, impotencia, valor, y sobre todo esperanzas...un sin fin de sensaciones.
Tuvieron que soportar la represión violenta por parte de la policía que trataba de dispersar las manifestaciones y tras no conseguirlo impusieron el toque de queda. También sintieron los golpes y latigazos de seguidores del ex-presidente montados en camellos y caballos que irrumpieron sorpresivamente en la plaza, algo tan sorprendente y de películas...pero era real!!!; la incomunicación con los medios (5 días sin acceso a Internet, cierran oficinas de la televisión Al Yazira o otros atentados, persecución al periodismo internacional). Aún así el deseo de libertad pudo más, heridos y muertos con dignidad de haber hecho frente a un régimen reclamando una vida mejor.
Supongo que contar más cosas del tema es excesivo puesto que los informativos estuvieron día a día contando esta historia que tuvo un final feliz. Solo queda esperar que el futuro como pueblo libre sea fructífero y beneficioso para todos esos miles de personas que estuvieron batallando por un ideal.
Hoy es el primer día en que pueden decir que son libres, y hasta dos generaciones, por primera vez...libertad, algo tan común para seres que disfrutamos de ella...
En estos días he leído algo alusivo a estos acontecimientos y precisamente decía algo así como que la revolución cuesta, hasta sangre, y no importa donde se lleve acabo porque luego de haber logrado esa revolución, ese mismo aire de revolución, lo respiramos todos...
Fueron 18 días de agonía, ilusión, sangre, lágrimas...18 días que lo recordaran como el inicio de la posteridad, como el orgullo propio de cada uno de los protagonista, del mundo como sociedad, el de todos como seres humanos. Hoy presento 18 imagenes, algunas mas conocidas que otras, algunas inquietantes, o emotivas, y hasta una que otra pudieran herir la sensibilidad de algún visitante de este blog...pero son reales. 18 instantáneas que tratan de captar ese aire de revolución...






















































sábado, 5 de febrero de 2011

De andanzas otra vez

Que el mundo Árabe me intriga y cautiva no es ningún secreto. Por eso es que siempre estoy atento a todo lo que tenga que ver con esa cultura y si puedo vivirla de primera mano mucho mejor.
Hace un par de semanas nos volvimos a aventurar otra vez en tierras Marroquíes y para dicha ocurrencia me acompaño mi socio de aventuras, de la vida, Javi. También se sumó la intrépida y simpática Claudia con su compi Jose.
La primer parada fue Tánger con su encanto colonial y decadente de una ciudad bastante occidental pero que en el casco antiguo aun se preserva la esencia de su medina árabe... sus callejuelas infinitas, colores cálidos, escaleras descascaradas, edificaciones típicas, rostros peculiares, niños agolpados jugando...pidiendo...
El hotel Continental fue nuestra morada en la ciudad marítima, un hotel decadente pero que todavía mantiene el esplendor y majestuosidad de sus instalaciones y decoraciones
La playa, el Mediterráneo visto desde el otro lado, su olor, su misma paz y el sonido musical de sus olas...
Vagabundeando por la ciudad, buscando siempre ese rincón de ensueños descubierto en The Sheltering Ski - El cielo protector - (Paul Bowles), sorprendiéndonos a cada paso con una mirada , un sabor, un nuevo recoveco y sobre todo por esa simplicidad en las palabras de nuestros interlocutores.
La segunda parada y destino final fue Chaouen( Shifshawen o Chefchaouen), el pueblito azul que no solo existía en sueños sino que era real. Azul mar, azul cielo, azul calma...Porque azul? tradición de judíos sefardí que se instalaron allí cuando fueron expulsados de España hace mas de medio siglo.
Sus callejones, un laberinto garzo en el cual merecía la pena perderse guiándonos solo por el ansia de ir sin llegar a un sitio en concreto...solo seguir el instinto de seguir...
Mezclarse con los nativos escondido dentro de una chilaba, tarea loca imaginada solo por mi, pero inquietante y divertida experiencia al querer creer ser uno más en una aldea añil sobre la ladera del Rif.
La ciudad prohibida para extranjeros se desnudaba ante mis ojos enseñando la belleza especial que todos los sitios poseen. 
Los días se hicieron largos, las noches cortas, pero al concluir el viaje todo había sucedido muy rápido pero disfrutado al máximo consciente de cada segundo que pasaba.
Tal vez no pueda contar una experiencia a través de palabras escritas, no se me dá muy bien, pero hago el intento. De todas maneras no quería privarlos de poder disfrutar de las imagenes que aún hoy se repiten en mis sueños. Que las disfruten.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Nuevas democracias



Cuando Mohamed Bouazizi de forma arrebatada y desesperada se quemó a lo bonzo el 17 de Diciembre nunca pensó que su nombre pasaría a la historia, y no como un mártir sino como un héroe que cambiara el futuro de mas de una nación árabe.
A partir de ese día Túnez no fue la misma, ni las personas sometidas volvieron a tener miedo. La palabra revolución volvió a tener sentido en la República después de 23 años gobernados por Zine El Abidine Ben Ali. Las desigualdades sociales y económicas, las borrosas garantias constitucionales y la corrupción gubernamental hicieron que la lucha, la esperanza y el derecho a la justicia renaciera en todos los habitantes...y el cambio se produjo, el reclamo encontró la luz.
En menos de un mes Egipto entendió que el pueblo es dueño de su destino y que la libertad es lo primero, aún a costa de la vida misma. Es que 59 años de gobiernos mal llamados democráticos, en elecciones en donde solo hay un solo candidato, y donde el fraude es lo corriente (eso me recuerda mucho a algo...), el reclamo es justo y necesario. La opresión llega a su final(?) Hoy era la marcha "por la liberación" en el Cairo y en casi todas las grandes capitales del país. En la misma protestaban contra la pobreza generalizada, la corrupción administrativa, la falta de libertades y por supuesto exigían la renuncia de Hosni Mubarak. Decenas de miles de personas de todos los estratos sociales reclamando un futuro digno y justo. Hasta estas horas el presidente no ha dimitido  pero a asegurado un proceso de transición, algo que inquieta los intereses de muchos países occidentales mas allá de lo que verdaderamente importa que es el futuro de un país que quiere ser dueño de sí mismo...


El efecto dominó se posa ahora en Jordania  y Marruecos trata de evitarlo moviendo fichas antes de que sea tarde...
Insospechadamente el cambio que hace años(muchos) vimos en la Unión Soviética se vuelven a repetir, de diferente formas, con distintas tonalidades, pero en su momento nunca se creyó que grandes doctrinas económicas y políticas como el socialismo en ese caso se desintegraría de la forma en que lo hizo. Somos testigos de un cambio que afecta a un sector segregado por la historia, cultura si se quiere, una sociedad desconocida para muchos y mirada con recelo quizás por la falta de información o por la falta de interés.
Pero todas las sociedades, culturas, naciones, poblaciones tienen el derecho a transitar
un porvenir creado por ellos mismos sin imposiciones ni "intereses" privados por agentes externos. Muchas ya han pasado por ese estado encontrado finalmente el estadio a su medida, bien por ellos. Lo injusto es que en el resto, la pobreza, la ignorancia, la subyugación, el poder impidan ese proceso... decenas de almas aún siguen quedandose en el camino por tratar de conseguirlo, no por ellos sino por los que vienen. 


Secundemos entonces esta idea de libertad de los pueblos desde nuestro lugar por mínima que sea la acción que tomemos, pero que valga la pena creer que podemos si queremos , todos por iguales.