viernes, 26 de diciembre de 2008
Espiritu navideño
domingo, 5 de octubre de 2008
A mi hermano
No entendí muy bien porque vinieron un día y se lo llevaron, mis lágrimas no cambiarían las cosas y las explicaciones de mi Mamila tampoco me conformaron, mi inocencia no podía comprender las del mundo de los grandes.
Pero así como se lo llevaron un día lo volvieron a traer a mi lado, estaba mas flaquito, mas desmejorado, pero esos ojos seguían siendo los mismos, pidiendo amor, el que yo le quería dar a borbotones...
Era el bebé mas hermoso del mundo con esa sonrisa contagiosa y esos rulos suaves y castaños...mi compañero de juegos...Aprendí a preparar biberones cada tres horas, a cambiar pañales, a hacer de papá, mamá, hermano, niñera, amigo y todo con mucho amor y con ganas. Pasábamos muchas horas los dos solos sin darnos cuanta el porque, solo creíamos tenernos el uno al otro para todo.
De repente un día nos separaron, esta vez me toco a mi, lo deje llorando sin que entendiera que pasaba pero presintiendo que era una despedida ...y nunca me lo perdono. Nunca entendió que yo también era un niño, que yo no sabia tampoco que pasaba, que igual que a él los problemas de los mayores también me afectaron, sufrí y me dolió.
Y nos apartaron, crecimos alejados. La tristeza de haber dejado a mi niño luego se transformo en culpa que con mi incipiente madurez tuve que saber sobrellevar. Luego esa culpa se disolvió con el tiempo y cuando casi estaba excento de ella las vuelta de este mundo nos puso frente a frente otra vez.
Pero las cosas no eran como hace años atrás, claro que no. Su niñez había sido muy difícil y su rechazo y rebeldía era algo lógico pero muy poco comprencible para muchos, era un niño y los niños son inocentes, puros y no tiene la culpa de la vida...En ese periodo de convivencia, que al principio fue caótico, aprendí a amarlo otra vez, a sentirlo mio, como cuando sabía llorar y yo corría a su lado por su mamadera...
A sus nueve años me fui, nos separamos por las vueltas que da esta vida, por segunda vez se quedo sin su hermano mayor y su silencio y resignación lo sentí por años en mis espaldas y en mi corazón.
Me perdí su niñez, sus primeras corridas, sus primeras palabras...y su adolescencia....
Ahora es un hombre, a veces cree que demasiado para su edad, a veces creo que mucho menos para los años vividos. Aún sin poder dar vuelta la página, sin terminar de entender que la vida te pega bofetadas pero no para culpar a nadie, sino para aprender, para seguir. Que la existencia es lo que viene y no lo que queda atrás.Que solo hay que dejarse querer para ver lo mucho que puede valer y lo importante que es para los demás.
Es mi hermano, el ser que marco mi vida cuando me miro con sus grandes ojitos desde los brazos de mi madre cuando llegó a casa, mi hermano ausente porque no lo tuve cerca mío y cuando estuvo no lo supe aprovechar...mi hermano, la persona incomprendida que aún no sabe que la vida es larga, que queda mucha felicidad por conquistar y por vivir...ruego a Dios para que lo descubra ...y que me deje estar allí a su lado para compartirla.
sábado, 27 de septiembre de 2008
Mi viaje por argentina(un pequeño diario)
Sábado 16 de Agosto, en Buenos Aires, después de más de 12 horas de vuelo. El reencuentro con mi madre, el abrazo eterno, los besos y el apretón de manos cómplice del amor y el cariño, la alegría de volver a vernos y mis nervios por estar en mi país después de cuatro años.
Caminar, ver y superponer las imágenes que tenía archivadas de una ciudad con otras que estoy viendo en estos días. Añorando encontrar en algún rincón parte de la "city" que formo parte de mí...pero nada. Es la misma Buenos Aires pero distinta, tiene su encanto, su color, y hasta un propio sabor pero falta algo y es mi tiempo, el tiempo que pasó y se perdió con el correr de las estaciones...y a la vez me doy cuenta que por mi ser, mi cabeza, las neuronas conectan de una forma distinta y no permiten recibir de la misma forma que antes lo que tengo en frente: una ciudad maravillosa que ya no me pertenece.
Lunes 18 de Agosto, camino a Salta. Regresando a mis raíces, a lo que deje atrás hace mucho tiempo. Voy en busca de tantas cosas, recuerdos, olores, sonidos, imágenes, afectos...sobre todo afectos. Sé que no voy a encontrar las cosas como las deje. Sé que todo cambia, yo he cambiado como no lo van a hacer las personas que dejé atrás pero aun siendo consciente de ello y me aterroriza la idea de que cambien también los sentimientos...ya siento un cosquilleo en el estómago y la desesperación por llegar, por ver a mi viejo querido, por renegar con mí hermano Tony, volver a recostarme en el templo de mi cama "cucheta" que me cobijo durante décadas...nervios porque quiero sentir ese olor a tierra, el cálido sol del trópico en mi cuerpo, por caminar por esas calles conocidas de memoria,...falta tan poco...
26 de Agosto, he regresado de Salta y cuanta emoción traigo conmigo. Aquel fuerte abrazo con mi padre excusado por cincuenta y siete meses de separación, aun sigo sintiendo su calor, sus charlas, su compañía, las risas de mi hermano, sus gestos, sus ojos...
Pocos días, muy corto el tiempo, tenía muchas personas que ver y algunas me quedaron pendientes. No pude ver a mi tía Ester y a mi tío Rafael, a mi tía María del Carmen y mis primos, tampoco ví a Angy, Ester, Julio y a Marcelo, y eso me apeno mucho. Pero pude disfrutar de mis amigos, Agueda el ser de hierro pero que pudo quebrarse en llanto al decirme adiós, Ramón, Diego, Carina regalándome una noche de compañia, risas y mucho afecto, Gachi, un resfrío no nos va separar; Vanesa, mil perdones por el tiempo que no pude dedicarte; Daniel, la honestidad y mi mirada hacia la adolescencia; Ariel, loc@ haciendo cosas y más cosas que te olvidas de mi; Mariela, madurez dentro de un ser aniñado y tierno; María, con tu abrazo me dijiste muchisimo; Marta, conociéndote tan poco me has sorprendido tanto; los chicos de la oficina: Pino, Amanda, Canela, Jorge, Mónica, Karina, igualitos a como los dejé y eso me hace muy feliz; Carlos, orgulloso de que quieras vivir; Sofia, gracias por confiar en mi y por regalarme la felicidad de Abril, la niña sol, mi ahijada; Mi abuela, mi tía Cuky, Pol, Juan Pablo, Mercedes, mi familia amiga y querida por siempre; Hugo, feliz de este reencuentro y saber que cumples tus sueños; Alejandro, gracias por estar siempre; mi tía Mary, la sonrisa que hace feliz a muchos; Dario, mi paisano responsable de haber contribuido a aumentar unos kilos de más...y mas...muchas cosas más serian interminables los adjetivos que podría agregar para todos ellos...
02 de Septiembre, noche de verano en Madrid, escribiendo este cuasi-diario en dónde solo quiero transmitir esta hermosa experiencia de mi viaje a mi país, a mi pueblo/ciudad, a mi raíz, a mi pasado, a mi historia, a mis sentimientos. Este anhelo guardado en lo mas interno de mi ser, este sueño se concreto y estoy feliz, porque pude experimentar el mismo amor de todas las personas que deje allí, feliz porque el tiempo ni la distancia cambió esa "amistad". Me faltó tiempo para estar más y compartir más, ya llegará, estoy seguro que algún día podré volver y querer más...
Los amigos
El 20 de Julio en Argentina se celebra el día del amigo, día que siempre tuve presente y más aún después de haberme alejado de muchos de ellos hace un buen tiempo. Con el paso de los días, semanas, meses, años el contacto con ellos ha sufrido un poco de enfriamiento...algunos casi no responden a los mail, y otros poco a poco dejaron de dar señales aún con mí incistencia.
"El dia del amigo"ya pasó y si bien figura con una fecha en particular en el calendario, hoy decidí hablar de ellos, en realidad no hace falta un día especial para recordarlos, todos los días de la vida son especiales para tener presente a las personas que han dejado huella de una u otra forma en nuestras vidas.
Por mi existecia(y que no es tan corta como a veces quisiera) han pasado muchas personas maravillosas, algunas han perdurado siempre, otras un buen tiempo, instantes, momentos, o aparecieron alternadamente, pero que me halagaron ofreciendome su amistad, su confianza, apoyo, sus hombros, sus tiempos, sus caricias, su comprension, sus cariños, el escuchar, el compartir, una sonrisa, un llanto, un secreto...
Desde niño, los compañeros de juegos, los vecinitos, los del jardín, personitas que con la inocencia en el alma eramos ángeles en un mundo armado para nosotros, Liliana, Miguel, Nicolas, Claudia, Cesar, Norma...
En la adolescencia los lazos empezaron a acentuarse y el primer paso a la experiencia de la vida con conciencia y responsabilidad, y claro, con curiosidad, fué dándose con presonas que Dios empezo a poner en el camino. En mi caso, la primera fue Sandra Valdiviezo, un angel de ojos expresivos y con un corazón de cristal....y enorme.
Estar en continuo movimiento de un lado a otro me permitio conocer mucha gente, a mis 14 años volver la ciudad de mi niñez me llevo a encontrarme con Marcelo Algañaraz en un mundo diferente al que nos tendria que haber tocado; la complicidad, el entendimiento y el cariño de hermanos eternos fueron los cimientos de nuestra eterna amistad.
En mis años de estudiante compartí tanto con tanta gente...la escuela, las discotecas, las escapadas a Yacuiba, las fiestas...Claudia, Zulema, Santa, Nancy, Adriana, Dany, Catalina, Mirtha, Patricia, Charata , Sofia, Graciela, Maria Elena, Gabriel, Charo, Yeny...
A mis 17 años cuando marché otra vez a Buenos Aires me encontré con otro mundo muy distinto al que me habia acostumbrado, un mundo mas adulto, con mas responsabilidades, un mundo mas real que hasta ese entonces habia tratado de evitar. Sandra siguio allí, Cinthia, Lucho, Gastón, Pablo, Patricia, Rocio, Adrián, Gabriel estuvieron en ese proceso que por momentos fué un poco agoviante pero que sirvió para saber enfrentar lo que vendria después: crecer y ser quién soy.
Con 23 años comencé a estudiar Comunicación Social en Tartagal y a jugar un poco a ser locutor, Dorian, Cancula, Dora, Rita, Gabito, Ramón me acopañaron en ese juego. También me inicie en el mundo del Trabajo en una oficina con un grupo en el cual me sentí muy cómodo y querido, Mariela, Amanda, Maria, Pino, Jorge, Canela, Ana, Ricardo, Mónica, Veronica la contención que necesitaba.
Luis, Carla, Diego T., Diego D., Alejandro, Hugo, Gachy, Angye, Carlos, Ramón, Vanesa, Karina Z., Ester, Ariel, Julio, Dario, Adrián, Roque, Ana, Picky, Karina O., un entramado de personas que dejaron tanto en mi ser!!!aparecieron en mi vida sin saber que a su lado no solo estabamos compartiendo un tiempo de nuestra existencia sino que me estaban ayudando a ser mejor persona, sí, porque de ellos tengo lo mejor: su amistad, un aprender de la vida, de experiencias, de deseos, de sueños, de logros y derrotas, aciertos y desaciertos, alegrías y tristezas, un sin fín de cosas...
No puedo dejar esta lista de nombres tan importantes para mÍ, sin nombrar a la persona que me hizo llorar al ver sus ojitos con lágrimas ...y esas lágrimas eran por mí, Agueda Tejerina, mi amiga, mi hermana, una luna que siempre está aunque a veces no la veamos, la niña-mujer que llegó a mi vida para quedarse.
Luego vino mi destierro voluntario, mi huida, mi deseo de lo desconocido, de probar...y aquí estoy en un Madrid lejano apartado de todos esos nombres(con almas) que enuncié anteriormente. Pero que también me permitió conocer a seres extraordinarios, Sergio(el amigo sin medidas), Omar, Paul, Julio, Joel, Renson, Dany, Riky...personitas con mis mismas inquietudes, sueños, anhelos, y ganas...que tambien quizás sin darse cuenta estuvieron apoyandome en los momentos más amargos y más felíces.
No es que quisiera nombrar a algunos y no a otros, puede que falten personas y no significa eso que sean más o menos importantes, o también puede que hable más de unos que de otros pero tampoco quiera decir eso el grado de importancia de los mísmos, lo único importante es querer hacer un alto en este trajín de la vida, en donde el tiempo y la distancia a veces juegan en contra, y poder decir que estoy orgulloso de las personas que conocí, que estuvieron a mí lado, que me hicieron felíz, que me quisieron por lo que era y por lo que soy.
Espero que en ellas tambien mi ser haya dejado algo positivo, al menos un poco de amor, el aprendizaje de quererse a uno mísmo como algo único, si fué así, mi tarea como amigo está cumplida y con eso ya soy felíz. Gracias a todos por haberme dado un poco de amor y por haberme hecho entender que la vida se contruye con el aporte de cada uno de ustedes. Los quiero.
A mi madre
Llegó el día de presentar a mi madre, un ser lleno de vida y de esperanzas, tanto que hay veces que ni ella misma se lo cree. Cerca de cumplir los 60 años, un ser con toda una existencia por detrás llena de esperanzas, desilusiones, de sueños, sufrimientos, penas, desaciertos, y también de muchas alegrías, risas y seguramente de orgullo de haberla vivido.
Una mujer con la valentía de buscar siempre la paz y la felicidad a cualquier precio intentándolo una y otra vez, aunque en algunos momentos el mundo se vino abajo hubo que salir adelante por ella, por mí , por los demás...La vida no fue fácil(quien dijo que lo fuese), la decepción del amor, la añoranza de lo perdido, el desarraigo de la familia, la tristeza de la soledad. Y en medio de todo eso, yo, su hijo, la luz de sus ojos, una parte de ella que no la tiene a mano y que por ratos es lo que duele. Duele el trago amargo de la partida de los hijos, de tener que entender que también tienen que hacer su camino como alguna vez lo hizo ella.
Pero tiene la vida, lo común de todos los días, los afectos viejos y nuevos, los recuerdos que tanto alegran, la familia que tanto la quieren, los niños de la escuela, la libertad de poder sentir, de poder elegir.
Hace treinta y cinco años llegue a su vida y fue un regalo para la mía. Ella me eligió. Llegué a los brazos de un ser maravilloso que me protegió con uñas y dientes, que me dió todo lo que tuvo y lo que no, que me enseñó lo hermoso de vivir y que me colmó de amores, que dejó de lado lo que fuese necesario. Me dió esa fuerza que hay que tener para seguir aún en los momentos mas oscuros, mas bajos. De ella aprendí a amar, a ser simple, autentico conmigo mismo y con los demás, a caer y a levantarme, y continuar...a confiar en las personas, a creer que son buenas, sinceras y honestas.
Su virtud mas grande: el amor, su defecto: el exceso de confianza.
Hace tiempo que dejo la clínica donde estaba ingresada, ha pasado el susto, su cuerpo le está pasando factura y los nervios no ayudan pero su fuerza y sus ganas luchan para seguir de pie frente al cañón viviendo, disfrutando y teniendo ganas de mas vida, porque aún tiene mucha por delante y que yo, aún en la distancia, la acompañare siempre.
Rubia...desde no se cuanto tiempo, con un andar coqueto y discretamente sensual, con una simpatía desbordante y discreta a la vez, con el problema de la pancita imposible de bajar pero disimulada a cualquier precio; subida a los eternos y cómodos tacones(la costumbre diría ella) corriendo de un lado a otro, de una escuela a otra, hablando y hablando...una personalidad auténtica.
Tendría que darle gracias por un millón de cosas y no bastaría, tendría que decirle tantas cosas bonitas y no me alcanzarian...tendría que darle tantos mimos y no serian suficientes...por que se merece mucho más. Solo yo sé como hijo lo que vale como madre, amiga, persona, sé de ese amor maternal que me quisiste entregar un día a finales de enero cuando comenzaba a abrir los ojos por primera vez y que lo sentí desde el principio hasta el día de hoy.
Aún recuerdo ir hacia ella cuando era un niño y nadie me entendía, solamente lo podía hacer ella, o cuando me despertaba de pie sobre la cama llorando y ella corría en mi auxilio. El día en que nos separamos en la estación de trenes y se quedo con lágrimas de impotencia y luego hacer hasta lo imposible para "robarme" a su lado otra vez. Trabajar todo el día para mantenerme, para que no me faltara nada...Recuerdo cuando me hacia las camisitas de niño bueno y me decía que tenia que estar todo el tiempo limpio, también recuerdo que crecí y mi adolescencia incomprendida hasta por mi mismo altero un poco la relación...le pido mil perdones por no haber sabido manejar esa situación, ahora con el tiempo que ha pasado me doy cuanta que las diferencias eran entendibles, yo pasaba por una situación de desorientación, incomprención, de no encontrarme a mi mismo...como podía pretender que lo hiciera ella...pero estuvo allí...a mi lado. Siempre estuvo allí, aunque no le hubiese gustado el camino que hubiera elegido, aunque no fuese precisamente lo que hubiese querido para mi...y sé que siempre estará.
Mi Madre, la Mujer con mayúscula porque su historia ha sido un reto y siempre hizo frente a la locura de la vida, siempre...sin olvidarse de mi. Es por eso que hoy, en esta noche apacible de verano quiero que conozcan a Cristina(Pety para muchos), mi Madre, la persona a la que no solo le debo el estar vivo sino también el haber vivido y tener ganas de seguir haciéndolo.
"Te quiero Ma".
Al fin te encontre
"Nunca pensé que pudiera sentirme así
como si nunca hubiera visto el cielo.
Quiero desvanecerme en tus besos ...
cada día te quiero más y más..."
"de repente el mundo parece como un lugar perfecto,
de repente se mueve con una gracia perfecta,
de repente mi vida no parece un despilfarro...
y mi mundo gira al rededor de ti."
No sé si apareciste sin querer, o si fue la casualidad de esta vida, o si yo instintivamente te llame a mi lado. Solo sé que sin querer las cosas se fueron dando muy despacio y muy rápido a la vez y, aunque desde un principio tratamos de poner limites y cautelas, la rueda giró y giró dejando nos llevar...
Hoy a pasado el tiempo, poco para muchos, y mucho para pocos, pero el suficiente para que hoy pueda escribir estas líneas tratando de expresar todo lo que siento por ti, pueda transmitir toda la paz que me das, todo ese cariño que te desborda y me inunda en cada abrazo, en cada caricia, en cada beso, y en cada simple mirada que me regalas.
Llegaste a mi vida en un momento oscuro, lleno de desesperanza, de agobio y de tormento, tiempo de desolación, inseguridad de mí mismo desilusionado de las emociones, incrédulo de la felicidad...pero tu paz me hizo olvidar el pasado y con tu paciencia te supiste ganar mí confianza. Me diste mucho cariño, mucha ternura, me hiciste entender que el mundo no se acaba y que mas allá hay más, y ese "más" eras tú; me sentí querido, mimado, sentí que volvía a gustar a alguien, me sentí deseado otra vez, volví a tener confianza en mí mismo. Sé que también puse mucho de mi parte, te di mucho, y aún hoy sigo dando mucho porque soy feliz dándote todo lo que soy y lo que tengo pero eso no corresponde que yo lo diga.
Luego conocernos, querernos, amarnos, vino solo sin proponerlo, sin cuestionarlo, sin planearlo, compartiendo todo el tiempo juntos aquí, allá, afuera, dentro, lejos, cerca...viviendo, enseñando a vivir y compartiendo la vida, nuestra vida.
Luego vino la boda, el gran día, me lo tome tan en serio, mas de lo que creía. Fue algo tan hermoso!!!una sensación tan extraña y tan bella a la vez, y luego ver tus lágrimas al finalizar la ceremonia..., la sorpresa de la llegada inesperada de mi madre para la boda..., la reunión con los amigos..., una experiencia y una felicidad única que tu me has regalado al darme tu amor..., el matrimonio!!!por fín había encontrado la felicidad que tanto había buscado, por fín tenía la familia que había anhelado, había encontrado la persona con la que quería(y quiero) compartir mi vida.
Los días pasan, los meses siguen el orden del calendario y los astros siguen guiando a nuestro favor esa vida en común que tenemos...con cuanto orgullo digo que eres mi marido!!!no sabes la paz y la seguridad que me das al tomar tu mano en la calle...la alegría de llegar del trabajo y encontrarte esperándome...o el placer de recostarme a tu lado y sentir tu calor y abrazarte y acariciarte aunque estés dormido...
Hoy no estas aquí, estas fuera del país por trabajo por unos días.. Yo aquí extrañándote, recordándote y escribiendo para tí, tratando de esta manera sentirte un pelin mas cerca de mi aunque no estés aquí. La casa, nuestro hogar me queda grande sin ti, esta muda solo me transmite que falta algo, alguien. Dar vueltas para no rendirme en la cama y darme cuanta de que estoy solito, de que me falta una mitad, un calor, un sol...
Pero sé que estas allí ansiando igual que yo el día de tu regreso y por eso cada mañana me levanto contando los días para que llegues otra vez a mi lado.
Amor, gordo, Javi, que mas puedo decir, me has dado mucho, me das mucho, yo simplemente te doy mi todo. Te amo.
Gracias Amor por jugar en serio a esto de la vida junto a mi.
Agueda
"no hay que vivir de recuerdos"...pero es que calaron tan profundo en mi! Amigos, lugares, olores, calles, afectos, días de sol, de viajes, de risas, de fiestas, la universidad, salidas, ilusiones,...quedó todo tan atrás...
A mi mente vienen las tardes de merienda en casa de Agueda con galletas y mermelada, esperando poder estudiar para términar hablando de otras cosas, o las salidas a cenar haciendo de los preparativos un ritual.
La conocí casi de casualidad, en la universidad, de más está decir que ninguno de los dos simpatizabamos. Con el tiempo los grupos se desintegraron y quedamos huérfanos y unidos por una salida, culpable: Ale.
Y desde ese día nunca mas nos separamos hasta que tuve que crecer y tomar otro camino lejos de allí, mientras fué la persona fiel que estuvo a mi lado aguantando mis bajas y mis altas, mis caprichos y mis malos humores.
Especial, tranquila, delicada, perseverante, justa, emotiva, amiga...muy amiga, hermana. Sus ojos oscuros tienen la fuerza de la conquista, el deseo de llegar, de libertad, de vivir. Coqueta con ella misma, para ella misma y para los demás a la vez que tan reservada y cerrada en ella misma...un atractivo difícil de evitar.
Su vida es una incógnita para muchos. Su mundo privado en dónde las emociones y afectos están siempre a flor de piel...pero muy pocas veces encuentran la luz, solamente los privilegiados pueden creer al ver la sensibilidad que en ella aguarda.
La niña grande, la madurez encontrada antes de tiempo, la necesidad de crecer por el ansia de vivir en un mundo de grandes y de historias hechas, tratando de buscar un espacio y un sentido en medio de todo eso, buscando...aceptando, y...lográndolo.
- "Me siento muy orgulloso de tí, con tu valor has logrado más de lo que creías, superaste metas que parecían tan lejanas en su momento...y aún en la soledad de tu mundo te llenaste de fuerzas para seguir y llegar. Y estas allí con todo el mundo para ti, con nuevas metas que conquistar y con nuevos sueños por hacer realidad.
Solo tú podrás entender, solo tú sabrás lo que quiero decir, sabrás cuanto te quiero, y lo que significas para mí. Solo yo se cuanto quiero transmitirte, cuanto me haces falta, y cuan felíz quiero verte. Solo yo sé que esta humilde forma de homenajearte, que es la única que sé, guarda todo el más sincero afecto que se puede tener por una amiga como vos."
La niñez
La niñez, el estado mas puro de la vida. Un tiempo de nuestros primeros días en los cuales la fantasía y la alegría invaden cada momento, cada mirada, cada pensamiento, cuando el único fantasma es el que inventamos con la imaginación.
Momento en el cual ser el centro del mundo llamado familia es el único objetivo...esperar las caricias sobre las mejillas, los mimos, los regalos, las fiestas por descubrir el universo que comienza a aparecer ante los ojos. Y saber que nada malo puede pasar, que nada amenazara, porque siempre habrá alguién allí para proteger, cuidar, para decir "aquí estoy", y ver como ese súper héroe de cómic nunca fallará.
La inocencia, la de los cortos años vividos aún, absorto de lo que hay mas allá de lo que las miradas pueden mostrar y saber...jugando a jugar, creyendo haber vivido todo sin haber vivido casi nada...y soñando...soñando que ser ese ser invensible, capaz de volar a mundos desconocidos, de desaparecer entre la gente, de ser importante para todos, no es imposible para un niño, no para este niño. Una ingenuidad maravillosa creada en cada juego con esos seres fantaciosos, con duendes buenos que ayudan a escondernos, que nos hacen reír sin querer.
La dependencia, del cariño, de la protección, del amor, muchas veces consentida y exigida, reclamada. Una sumisión necesaria en un vinculo desigual pero justo. Siempre en la busca de esa aura protectora que envuelve y hace que te dejes llevar, no importa dónde, sabes que estará allí. Todos los animales luego de nacer dependen de otros para sobrevivir, el ser humano mas aún, necesita de otro ser, para aprender, para sentir, para vivir. La dependencia del amor.
Y el llanto, el llanto injusto que llega sin saber muy bien el porqué, sin esperarlo y sin comprenderlo. Simplemente aparece y por mas que se busquen las respuestas no se entienden, no entran en la cabecita de un soldado de juguete más. Como es que en un mundo de cochesitos a cuerda y crayones gastados puede existir el dolor, el lamento, la experiencia desconocida que marca y enseña a la vez ...para terminar dando cuenta que eso mucho tiene que ver con crecer.
En mi niñez hubo mucho de estos ingredientes, mucho amor, demasiado, el de mis padres, el de mis tías, abuelas, de gente que estaba alrededor. Fui tan inocente, tanto, que muchas veces añoro esa pureza, ese no saber, esa falta de maldad, lástima que se termina...Dependí de mucho, y de muchos, aunque esas dependencias desaparecieron prematuramente, la vida me apuro y hubo que madurar, me faltaron cosas, sentimientos, personas, y aprendí que solo, cuesta, pero se puede. Y el llanto, claro que estuvo, está y estará, eso y la vida forman una simbiosis en la cual ninguna exite sin la otra, no lo justifico, pero si estoy seguro que si no lloras, es porque no has vivido.
Pero con lágrimas y todo, aún añoro esa niñez en la que fuí muy felíz a mi manera y que duró poco. Quisiera volver por unos instantes a probar nuevamente esa sensación tan especial que me cautivó y arropó, volver a sentir el calor de los abrazos que tenia a lo largo del día sin tener que pedirlos, volver a correr para esperar a papá cuando llegaba del trabajo y buscar entre sus cosas la golosina de siempre...volver a creer que esos juguetes que encontraba debajo de la cama me los dejaban los "Reyes Magos", imaginarme y crear un mundo completando los "kalkitos", mostrar con orgullo cada ropa con la que me vestía mi madre...tantas cosas...
Hoy con nostalgia debo aceptar que el tiempo pasa y que no regresa, solo queda en lo mas profundo de mi ser esa linda sensación de la niñez, de haberla vivido y disfrutado al máximo, y estar orgulloso que aún, a pesar del tiempo, la esencia de la misma sigue dentro de mi.
La soledad
Como definir una palabra que suena agradable cuando sabemos que no inspira precisamente algo grato...tal vez no sea simplemente definirla, sino mas bien sentirla...y como expresar lo que se siente a través de palabras si eso es tan personal, tan único. Me atrevo a hacer el intento.
Hubo veces que he tenido una necesidad atormentante de ella, mi escape, el encuentro de mí mismo, la cárcel de mis libertades...el cerrar los ojos y creer que en la soledad encuentro la paz que buscaba. La trinchera de mis agobios, el cáliz de salvación y de autoentendimiento. El respiro que me hace sentir que soy, que existo, que valgo, que sirvo, compartir mi mundo tan especial y singular con ella, vivir mi realidad dentro de mis fantasías sin criticas ni cuestionamientos, y creer que en mi aislamiento soy todo lo feliz que quiero.
Pero también hubo otras veces en las que la soledad me confinó en mi rincón oscuro y me clavo sus garras en el pecho, me hizo temer, me hizo llorar...darme cuenta que a pesar de estar rodeado de mucha gente finalmente estaba solo...ahogarme en el asfixiante sinsentido de la nada. Creer que el mundo se termina, que no hay salida, que nadie entiende, que es imposible, que no tiene lógica, que todo es absurdo, que nadie comprende, que eres uno contra todo.
Dos antítesis de lo que es la soledad, lo que provoca, lo que inspira.Bendito el que no se refleje en alguna de estas sentidas palabras escritas, podría considerarse una divinidad, porque todo ser terrenal ha probado la savia de la soledad, de esa soledad a veces injusta, otras desafiante y muchas veces en son de paz que dá el alivio.
"Quisiera estar dentro de una burbuja de cristal, en donde nadie pueda penetrar, donde nadie me pueda lastimar", lo escribí cuando era un adolescente, era mi visión de la soledad: un escape, un huir de lo que me rodeaba. Han pasado los años y la soledad ahora, y tan solo por momentos, es una circunstancia pasajera que me cautiva y me desestabiliza por segundos...porque ahora estoy seguro que no quiero tenerla a mi lado, no es momento... no es necesario.
viernes, 26 de septiembre de 2008
Tarde de domingo
2 de marzo
Estar solo un domingo por la tarde como que no es un buen plan, pero hay veces que alivia el alma con el respiro que dá la soledad, el silencio, el poder encontrarte contigo mismo y replantear cosas pasadas y porque no cosas futuras.
Al despertarme vinieron a mí recuerdos del ayer, cuando el tiempo no pasaba, cuando las preocupaciones materiales no importaban(quizás porque creía que no existían) y cuando las obligaciones eran muy limitadas: mi adolescencia. En esa etapa de la vida trate de construir un mundo ideal dentro del real, trate de dejar muchos problemas al margen para poder seguir adelante con la vida que se me presentaba.
Para situarlos un poco desde los diez hasta los catorce años estuve viviendo en Capital Federal(Bs.As.), luego regresé a mi ciudad en la provincia de Salta hasta que termine mis estudios secundarios para luego volver a Buenos Aires a estudiar la universidad. En ese tiempo conocí mucha gente y nombrar algunos y no nombrar a otros sería muy descortés, además no me lo perdonarían(igualmente habrá tiempo para ello seguramente), pero, sí tengo que escribir uno de esos nombres: Sandra.
Nos conocimos a la edad de diez u once años, nuestras madres nos enviaban juntos al cine, pero recuerdo que nuestra amistad empezó verdaderamente en Chapadmalal, en esos viajes de fin de curso en el cual apareció ella por detrás y sin saber muy bien quién era me di cuenta que estaba hablando con la que sería luego mi mejor amiga de la adolescencia y de mi juventud.
Y así podría seguir contando miles de anécdotas pero no terminaría jamás. Sandra, una amiga especial que he querido y quiero. Con ella he compartido muchas cosas, muchas experiencias...las primeras salidas, las primeras discotecas, el primer tabaco,nuestras primeras borracheras, en fin cosas que quedaron en mi mente. Paro también compartimos emociones, nos entendimos y comprendimos con las diferentes sensaciones que teníamos en esa etapa de la vida, nos escuchamos, aconsejamos o simplemente compartíamos el silencio, porque en el silencio también decíamos mucho. Éramos como hermanos, reímos, lloramos, nos ilusionamos y hasta compartimos algún fracaso. Una persona excepcional, simple, humilde, alegre, sensible, graciosa, reservada...y podría dar muchos mas adjetivos y estoy seguro que no me equivocaría, porque a pesar de que ha pasado el tiempo, sé que la esencia nunca la perderá.
Y dije que "ha pasado el tiempo" y en ese tiempo también han pasado muchas cosas en cuanto a esa grandiosa amistad que para mi fue como un culto. Hubo un silencio, una ausencia que se extendió en el tiempo que me dolió mucho, no sé si fue la distancia, no sé si fué mi culpa, lo cierto es que hasta el día de hoy nunca lo entendí.
Un día cualquiera recibí la llamada esperada de mi amiga eterna invitándome a su boda, a la cual acudí, esa vez y un par de encuentros muy esporádicos fue la relación de amistad que tuvimos desde su silencio.
Se que las cosas cambian, las circunstancias, los tiempos, los amigos, hasta los sentimientos, la vida...pero las personas no cambian. Por eso sé que Sandra sigue siendo tal como era, se que a pesar del tiempo, la distancia, y los diferentes caminos que hemos tomado sigue siendo "ella", la niña de ojos grandes y mirada profunda, la de la sonrisa pícara y la de las palabras reservadas...la amiga que siempre estuvo, pero que también en muchos momentos me faltó; la amiga que hoy sin su presencia, con su silencio, me trae nostalgias...pero que también me da la felicidad de saber que la conocí. A ella va dedicado este domingo de recuerdo, estas palabras tan cargadas de sinceridad y de sencibilidad, espero algún día las pueda leer y saber que aún en el tiempo la recuerdo.
Mi padre
Hoy quiero presentarles a mi padre, esta debe ser una de las pocas fotos que tengo de él y aun no entiendo muy bien el porqué...nuestra relación fue muy especial. Parte de mi niñez y de mi adolescencia la pasamos alejados por circunstancias de la vida, recién en mis últimos diez años en Argentina volvimos a estar juntos.
Debo confesar que la relación siempre fue un poco difícil pero también voy a reconocer que parte de la culpa fue mía, pero nunca dudé de su amor de padre y mi cariño y respeto de hijo.
Miren su mirada, su gesto, su orgullo...y yo, su hijo.Aún puedo sentir esa mirada y aunque no esta a mi lado se que es la misma, se que aunque ya no soy ese niño desprotegido sus sentimientos son mas inmensos todavía, siento que aunque no soy lo que en ese momento hubiese deseado para mi, aún así, me ama como el primer día...y más.
Víctor, heredé su nombre y hoy más que nunca lo llevo con orgullo, muy lejano me suena ese frágil"Fabián"como solían llamarme mis amigos en antaños, ahora respondo instintivamente cuando siento el nombre de "Víctor"que es como me conocen aquí.
Seguramente seria un orgullo para mi padre saber que su hijo mayor lleva como nombre de pila el mismo que el suyo, tal vez hasta le suene raro algún día decirlo desde sus propios labios el día en que nos volvamos a encontrar.
Mi querido viejo, sesenta años en tus espaldas, con tus berrinches y tus manías dificiles de entender, con tu experiencia de sabio que dan los años, con tus líneas en el rostro y tus canas que dibujan signos de haber vivido, de haber aprendido, de haber madurado, de haber querido, y claro, como olvidar, con tus caprichos de niño que enternecerían a cualquiera que te viera.
El es mi padre...me han quedado tantas cosas por decirle aún, tantas caricias por darle, tantos momentos de mi tiempo para escucharle, me ha faltado tanta sencibilidad para decirle una y más veces que lo quiero...y me he dado cuenta de ello ahora que no lo tengo, ahora que está tan lejos...
Resurgir
Han pasado cerca de 10 meses y es hoy cuando puedo volver nuevamente a sentarme frente al ordenador para poder decir que aún estoy aquí. En todo ese tiempo han pasado muchas cosas, buenas y malas, pero finalmente se puede decir que seguimos de pie y con muchas ganas, ilusiones, alegrías, sueños y toda la esperanza que hay que tener siempre ... aunque pienses que todo se termina.
Como dije en el articulo anterior, este blog tiene como fín poder expresar y mostrar parte de mi vida a quienes quiero y tengo lejos, a amigos que dejé atrás, a amigos que aún están, a nuevas personas que se cruzaron en mi camino, y claro, a toda persona que quiera empaparse de mis palabras e imágenes y formar parte de mi vida a través de la pantalla. Y así, todos juntos ya podemos dar inicio a esta historia q es tan actual como la vida misma.
Llevo más de tres décadas respirando y soñando con el día que vendrá luego, emanando felicidad y ganas de vivir por medio de mis poros; tratando de disfrutar de cada momento, de cada afecto, de toda experiencia que se presenta, por mas insignificante que parezca, lo tomo todo, porque ese "todo"me llena, me hace, me forma, me crea. Aún hoy, después de tres décadas no dejo de estar orgulloso de lo que Dios me regalo: mí familia, los amigos, las personas que no fueron amigos pero que aparecieron en determinado momento de mi vida y luego sin decir nada desaparecieron...pero estuvieron. Orgulloso de todo lo que hice y lo que no hice, estoy seguro que de volver a nacer volvería a cometer los mismos errores, no cambiaria nada porque no tendría sentido, los aciertos como las equivocaciones tienen su razón de ser, simplemente que de nada sirve preguntarse y torturarse por el "porqué". Orgulloso de poder vivir como quise, como lo he sentido.
A esta altura creo que no necesito mucha presentación, aunque quizás alguien se interese por estas narraciones y no sepa de quién se trata, o tal vez, puede pasar, que alguien que ha creído conocerme se dé cuenta en el transcurso de esta charla cibernética que no era así. Simplemente puedo decir que me llamo Fabián, o Victor, para muchos conocido como Sharon, que a lo largo de mi vida he aprendido a amar más a mis padres, a mi hermano, y a mis amigos, he vivido varios desarraigos yendo de un lado a otro, el último me ha llevado al otro lado de lo que hasta ese momento era mi mundo, al viejo mundo. Estoy en Madrid desde un poco más de tres años, casado con la persona que amo y que siento que me ama, y agradecido a Dios por haberme permitido encontrar la felicidad que tanto he buscado.
jueves, 25 de septiembre de 2008
Empezar de nuevo
Claro que no contar parte de la historia seria dejar huecos y eso no sería justo...es así que decidí copiar y pegar las cosas que tenía en el anterior blog con algunos aditivos, aquí creo que estaré mas seguro...empezamos?