martes, 13 de julio de 2010

Un mundial mas...

Aún con la alegría del triunfo de la selección española en el mundial de Sudáfrica 2010, debo reconocer que también en mi la dicha me desborda porque al margen de ser un eterno y orgulloso argentino esta felicidad que inunda las calles es muy contagiosa.
La crisis, cual?el desempleo, cual?, el calor, cual? todo quedó reducido a la nada por unas eternas horas y se percibía en cada rincón de Madrid, en cada español, indú, senegalés, dominicano, ecuatoriano, brasileño, paraguayo, pakistaní, marroquí, y podría seguir enumerando un montón de nacionalidades más; porque el entusiasmo era colectivo, todos formaban parte de un júbilo que directa o indirectamente lo hacían propio. Al salir por las calles a ver el festejo se repetían los colores, en este caso rojo y amarillo, pero podrían haber sido cualquiera, lo que era muy distinto eran los rostros que los llevaban y eso fué lo que más me cautivó de este mundial
En el ´78 era muy pequeño para experimentar lo que era que tu selección ganara el mundial, en el `86 tenía otras cosas en mi cabecita como para dejarme tentar por el disfrute de ser "los mejores del mundo". Hoy ya con un cierto grado de madurez (sensata?), y con motivaciones y convicciones que van más allá de un mero "triunfo" puedo entender la ilusión no de un país, sino de una sociedad multicultural que se vió representada por un grupo de once personas, y creer que además de lograr la copa del mundo también se merecía una especial felicidad añadida para todos en igual medida.
En las calles la diversidad se masificó y la emosión se generalizó...lo ví, lo experimenté, me enterneció.



Mis más sinceros respetos y admiración a todas las selecciones que particiaparon en este mundial, y en especial a una sociedad que me hizo participe de sus festejos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En este momento en que casi todos estamos enfrentados contra casi todos, el pueblo necesita alegrías que nos aúne, sin banderías políticas, religiosas, homofóbicas,etc., que nos hagan sentir total y plenamente felices.
Cuando eso ocurre olvidamos los pesares cotidianos y SOMOS FELICES todos mezclados.
Nosotros aquí en Argentina también tuvimos hace poco nuestro encuentro de hermandad en el festejo del bicentenario.
Esos momentos no se organizan sino que salen de dentro nuestro y nos hacen sentir que estamos vivos.
Serrat lo relata con su sabiduría en su tema "Fiesta".
Te comento que mi video de Shakira es más bonito que el tuyo.
Y por último: FELICITACIONES CAMPEONES MERECIAN GANAR LA COPA PORQUE FUERON LOS MEJORES!!!!!!!
Besos mil. Tere.